AEROSMITH

"ROCK IN A HARD PLACE"

Este es el primer disco que voy a recordar, de la serie de lanzamientos que hubo hace 30 años. Buena época para el hard rock y el heavy metal.

Quizás uno de los discos más infravalorados de los de Boston, y era lógico en su momento. La banda no pasaba precisamente por sus mejores momentos a nivel personal. Problemas con las drogas, ya muy salidos de madre, marcha de Joe Perry y Brad Whitford, y los discos anteriores, "Draw The Line" y "Night In The Ruts" pese a ser muy buenos discos, habían bajado un tanto el listón compositivo y no tuvieron tan buena aceptación como su obra definitiva, el "Rocks". Pero con todo, hasta en los peores momentos, Aerosmith eran capaces de sorprender a propios y extraños, y lo hicieron, a pesar de que en su momento el público no acabase de entrarle un sonido más hardrockero, o no aceptasen a sus nuevos miembros, Jimmy Crespo y  Rick Dufay, que, por cierto, realizaron un fantástico trabajo a las guitarras, editando, como he dicho antes, un disco más hardrockero que sus predecesores, con auténticos cañonazos como eran "Jailbait", la macarrónica "Ligthning Strikes", "Bitch's Brew", "Bolivian Ragamuffin'", el boogie "Rock In A Hard Place (Cheshire Cat)", y en plan más tranquilillo, el blues de "Push Comes To Shove", la psicodelia de "Joanie's Butterfly", y la versión del standard de Julie London "Cry Me A River". Lo dicho, un disco a reivindicar, que en su día recibió muchos palos, pero que, sin llegar a las cotas de sus dos grandes obras "Toys In The Attic" y "Rocks", es infinitamente superior a todo lo que han hecho desde que les dio por hacer baladitas para películas de meteoritos.