10/20/2013

STREET SURVIVORS






Aprovechando que hoy se cumplen 36 años del fatídico accidente de aviación, quería recordar el que fue el disco publicado por la formación de Lynyrd Skynyrd, a la que alcanzó esta tragedia.

Y es que, "Street Survivors", tras el bajón que supuso para la banda, su anterior trabajo "Give Me Back My Bullets", que sin ser en absoluto un mal disco, se empezaba a notar el cansancio de giras sin parar, abusos de sustancias, etc.,  fue un rebulsivo absoluto, que les llevó de nuevo, a las cotas alcanzadas con sus dos primeras obras, "Pronounced Leh-Nerd Skin-Nerd" y "Second Helping". Mucho tuvo que ver en ello, la aportación del nuevo miembro, el guitarrista Steve Gaines, que no sólo incorporaba su guitarra, sino también sus dotes como cantante y compositor, que se pueden apreciar, como cantante, cuando se canta a medias con Ronnie Van Zant, "You Got That Right", y como cantante y compositor en el blues que cierra de manera fantástica el disco, llamado "Ain't No Good Life". Por no hablar de sus duetos a las guitarras con la otra bestia parda que era Allen Collins. Todo el disco está repleto de temazos, es imposible quedarse con uno o dos. Desde rock&roll festivo de la mano de "What's Your Name", la claptoniana "That Smell", en la que Van Zant advierte sobre los peligros del abuso de las drogas y el alcohol, recordando una hostia que se dio Gary Rossington con su coche, la épica de "One More Time", el frenético boogie de "I Know A Little", que recordaba al "Call Me The Breeze" de J J Cale, que versioneasen en su segundo disco, La preciosidad country de "I Never Dreamed", o su versión del tema de Merle Haggard "Honky Tonk Night Time Man".

Una colección de canciones que tira para atrás, y que hicieron que la banda volviera a arrasar en cuanto festival se les pusiera a tiro, como se puede ver en las filmaciones del festival de Knebworth de ese mismo año, el 77, en el que se comieron vivos a todos unos Stones. Lamentablemente, ocurrió lo que ocurrió en la gira, con el maldito avión Convair, y todo se fue al traste, con el fallecimiento de Ronnie, Steve, la hermana de éste, la corista Casey, y el road mánager Phil Kilpatrick en el accidente a bordo del avión, en los bosques de Gillsburg (Misisipi) camino de Baton Rouge. Los demás miembros de la banda, quedarían durante un tiempo con secuelas físicas y psíquicas, estas últimas, se las curarían cuando montaron la Rossington-Collins Band, y más tarde, en el 87, cuando se reunieron con el hermano menor de Ronnie. Para colmo, la portada de "Street Survivors" durante  mucho tiempo, por razones obvias fue censurada, eliminando las llamas que aparecen detrás de la banda en la foto. Una verdadera tragedia que truncaba la carrera de una formación que no cuesta adivinar lo grandes que hubieran podido ser en una siguiente obra, de no ser por el fatídico accidente.



Si no has escuchado todavía "Street Survivors", no sé a qué esperas. Yo, lo estoy oyendo una vez más, a la salud de Ronnie, Steve, Cassie y Phil.







10/19/2013

MÁS DE LO MISMO PERO, A QUIÉN COÑO LE IMPORTA

MOTORHEAD
"AFTERSHOCK"






Que sí, que sus detractores podrán decir que hay riffs más que escuchados, que si el sanbenito de que siempre hacen lo mismo (si uno araña más de la superficie, se dará cuenta de que no es así del todo), que si los más nostálgicos verán demasiado metalero el sonido de batería de Mikkey Dee, y echarán de menos la guitarra de Fast Eddie Clarke.  Todo lo que ustedes quieran, pero un servidor, en estos tiempos de destrozo de derechos, de pobreza, robo e injusticia, bandas con la mala hostia de los muchachos de Lemmy, son más necesarias que nunca. Y aunque ya no nos vayan a sorprender, y tengan cañonazos como "Heartbreaker", "Coup De Grace", "Going To Mexico", "Queen Of The Damned", "Paralyzed"  o "End Of Time", que nos traigan muchísimos ecos de otros clásicos, qué quieren que les diga, me suenan a gloria esos pildorazos. Es la medicina que necesitamos los motorheadbangers cada uno o dos años. Y si viene aderezada con andanadas blueseras del calibre de "Lost Woman Blues", rock&roll salvaje como "Do You Believe" o "Knife", medios tiempos vacilones  como "Death Machine" o "Silence When You Speak To Me",  temas que todavía tienen capacidad de sorprender como es ese blues rock lentorro de "Dust And Glass" (los que infravaloran a Phil Campbell, tendrían que escuchar su solo aquí), Boogie con influencias de ZZTop (una de las bandas favoritas de Lemmy de siempre) y con piano, en "Crying Shame" y más rock&roll como "Keep Your Powder Dry", pues cojonudo, oigan. Más vale disfrutar de la dosis de Motorhead todo lo que podamos, porque el día que desaparezcan será muy triste, y Lemmy ya nos ha dado un susto este verano. Lo dicho, que es un placer tenerles de vuelta.