ROSE TATTOO
Sala Heineken
31/03/07
¡Qué mesecito de conciertos que llevamos, y qué conciertos más cojonudos! Y éste, ya sabía un servidor que no iba a ser menos. Después de 25 años, desde la última vez que se pasasen por estas tierras (me refiero a los Madriles, ya que hace pocos años, dieron otro estupendo show en la concentración motera de Sestao), por fin, un sueño para muchos, en los que yo me incluyo, se ha hecho realidad. Algunos, éramos muy crios, cuando se pasaron por el Rockola, y después de dos formidables discos, como los dos últimos, "Pain" y "Blood Brothers", iba siendo ya hora de que nos matasen de placer, con ese rock&roll incendiario, con olor a wiskey, que solo ellos saben hacer con esa maestría, y esa actitud. Y esa es la palabra que mejor les define: actitud. ¡Qué entrega, que energía, y qué pelotas demuestran estos tipos en un escenario! Se vuelve a repetir lo de Saxon, lo de Iggy, lo de los Motor, y otros muchos tipos de mediana edad, que, literalmente, se comen en el escenario a cualquiera más joven. Con un Dai Pritchard, pletórico con la "slide", cumpliendo con la dificil tarea, de que nadie eche en falta al añorado Pete Wells, un Stephen King al bajo, que no paraba de bromear y transmitir buen rollo, al lado de un enérgico, carismático, y visiblemente emocionado Angry Anderson, que se dejó los huevos en todo momento, sudando como una bestia, con su mono de "working class hero", deleitaron a todo cristo, con algunos pildorazos de su "Blood Brothers", intercalándolos, con todo su arsenal de clásicos, de la talla de "Scarred For Life", "One Of The Boys", "Astra Wally", "Remedy", "We Can't Be Beaten", "Rock&Roll 's King", o por su puesto, la imprescindible "Nice Boys". Una de las mejores veladas rockeras de los últimos meses, sin duda.
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