3/03/2017

RORY GALLAGHER

"PHOTO-FINISH"


De haber seguido vivo, ayer, uno de los músicos más grandes que hubiera dado Irlanda, hubiera cumplido nada menos que 69 años. Aprovechado esto, me apetece comentar por aquí, uno de sus discos más clásicos. "Photo-Finish", el séptimo disco de Rory Gallagher en su carrera, quizás no sea el mejor trabajo suyo, pero sí que es uno de sus discos más famosos y clásicos, y uno de los más rockeros que grabó, que además, hizo que montones de metalheads de la época (año 78), y de épocas posteriores, descubrieran a este hombre, y se tiraran de cabeza a su discografía, y al blues, de paso. Rory Gallagher trató de retomar con "Photo-Finish", el sonido de power trio de sus comienzos, y para ello, ni corto ni perezoso, fichó al potente batería Ted Mckenna, que años más tarde acompañaría a Michael Schenker, y se deshizo del teclista Lou Martin, dotando a la formación una gran fuerza rockera. Por supuesto, su inseparable Gerry McAvoy siguió encargándose del bajo. Y es que, nadie con sangre en las venas puede resistirse al riff inicial de la enorme "Shin Kicker", con la que se abre el disco, la bluesera "Brute Force & Inorance", que sigue, la fuerza rockabilly de "Cruise On Out", el blues con harmónica incluída de "Cloak & Dagger", pura marca de la casa, la preciosa descripción de la vida en la carretera que es la magnífica "Overnight Bag", la clásica de clásicas "Shadow Play", quizás el tema más conocido del disco, y de la carrera del irlandés, todo un temazo y una lección de cómo hacer temas abrasivos y cargados de feeling, con un riff central que se te queda marcado a fuego en el cerebro, el otro bluesazo que es "The Mississipi Sheiks", la repidante y con cierto ramalazo country "The Last Of The Independents", y cerrando la obra, al menos hasta sus reediciones digitales, "Fuel To The Fire", todo un señor blues, que en ciertos momentos llega a recordar a Hendrix, y cierra, o cerraba el disco, con broche de oro. Cuando el disco se reeditó, se añadieron dos temas más: "Early Warning", un cañonazo rockero sobre el peligro nuclear, que suena de maravilla, y el Honky-tonk titulado "Juke Box Annie, en el que Rory demuestra su dominio al dobro, y la harmónica de nuevo. Lo dicho. Un disco imprescindible en la discoteca de cualquier rockero que se vista por los pies, e ideal para introducirse en la música de este ilustre irlandés.

No hay comentarios: