Así se llama el proyecto que parió hace dos años el guitarrista de los Kentucky Headhunters, Mr. Greg Martin, titulando de igual manera al disco que nos ocupa, en el que el amigo Greg se sumerje en territorios más hard, blues y soul, de lo que acostumbra con su banda madre, más orientada hacia el rock sureño y el country-rock. Acompañado por una formación de altura, en la que destaca sobre todo el cantante, Jarrod England, que le da un feeling a todos los temas, increíble, así como la sección rítmica que forman Dean Smith y Chris Hardesty, al bajo y la batería, respectivamente, y los coros de Sandra y Tonya Dye, en los temas más souleros del disco. Se pueden ver influencias de Hendrix, Free, Bad company, o el estilo de Duane Allman, o los Bluesbreakers de la época de Mick Taylor o Clapton, a lo largo del disco, lo cual es muy de agradecer."Run Rufus Run", de haberse publicado en otros tiempos, estaría sonando en todas las radios habidas y por haber de los States, al igual que pasaría con la funkera "13 Daze", con un rollo muy a lo Blackfoot/ZZTop, "High On Heaven Hill", con una slide matadora, "El Lago", en el que se nota la influencia del soul y el funk a saco. Como versiones, vienen dos standards del blues, como son las archiversioneadas "Good Morning Little Schoolgirl" del gran Sonny Boy Williamson, y "I Ain't Superstitious" del no menos grande Willie Dixon, aunque conocida por el gran público por la versión que grabó Muddy Waters, entre otras muchas. No se han comido mucho la cabeza escogiendo dos temas clásicos del blues, pero quedan de maravilla.
Lo dicho, una sorpresa más que agradable, este grupo y este disco.
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