Por fin, ayer, tras un buen montón de años esperando ver a una de mis bandas favoritas de siempre, pude disfrutar de un show de Blackfoot en Madrid, algo, que si me lo dicen hace tiempo, ni me lo hubiera creído. Discutiendo con varios colegas tras el concierto, salieron algo decepcionados por el repertorio, pero ese no fue mi caso. Sabía que no me iba a encontrar con los Blackfoot del "Highway Song Live", y que, al revés por ejemplo, que unos Molly Hatchet, Blackfoot no están tan en activo como los de Jacksonville, y esto hace que se noten un poco faltos de rodaje en los directos. Si a esto le sumamos, que tuvieron que tocar con el equipo de unos 69 Revoluciones (por cierto, magníficos teloneros) sin apenas tiempo para probar sonido, pues es lógico que al principio la cosa tardase en calentarse. Pero aquí me puede la parte sentimental, y es que, un concierto que empieza con "Good Morning", sigue con su versionaza del "Wishing Well" de Free, y con más temas del calibre de "Left Turn On A Red Light", "Baby Blue,"Train, Train", "Fly Away", "Higway Song", "Dry Country", "Payin' For It", "On The Run", o "Fox Chase", temas todos ellos que han sido gran parte de la banda sonora de mi vida, pues qué quieren ustedes que les diga. Para mí fue rozar el cielo. Así de claro. Además, teniendo en cuenta que, sí, que vale, que no está Rick Medlocke, pero que Mike Estes cumplió su papel a la perfección, y Greg T. Walker y Charlie Hargrett, otra cosa no tendrán, pero oficio y tablas, de sobra. Además tuve el placer de agradecerles personalmente haber hecho tales temazos (Gracias Jose)que me han acompañado durante tantos años. Espero que vuelvan por aquí, cuanto antes mejor.
Y, por cierto, gracias Jesus por las fotos. Macho, te lo has currado de verdad.
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