Anoche, como otras tantas veces, fui a ver a los colegas a mi garito preferido de Vallecas, La Urbe. Uno de los sitios en los que menos movidas haya visto, en los casi 17 ó 18 años que llevo parando. Pues bien, uno está acostumbrado, de un tiempo a esta parte, al constante acoso policial al que somete el ayuntamiento de los demócratas de orden, a los garitos de música que no se ajusta al canon de los 40 siempreiguales. A todas horas, entran, cuando no municipales, nacionales, pidiendo licencias, etc. Según ellos, la Junta Municipal, tiene una lista de bares a los que hay que incordiar, para recaudar pasta, para las obras del Faraón, en forma de multas, suponemos, y a la Urbe, le toca la china. Tiempos muy demócratas éstos, pero bueno, qué le vamos a hacer.
Ahora bien, lo de anoche, fue desmedido, excesivo, y más propio de un Estado fascista y parapolicial que otra cosa. La policía conoce de sobra el garito, y sabe que es muchísimo menos problemático, que los antros de salsa de los alrededores. Y aún así, el despliegue policial que entró, con al menos tres dotaciones, equipados con material de antidisturbios, uno de plantón en la puerta con una escopeta de pelotas de goma al hombro, el que dirigía el cotarro, con unos modales que en nada envidiaban a un oficial de la Gestapo, separando a las tías de los tíos, para pedir la documentación, los que la dábamos, siendo cacheados como delincuentes, y luego, fuera, a la puta calle, hasta que acabase el show... Vamos, una redada en toda regla, y una muestra más del cada vez más notorio acoso al que tiene sometido Gallardón, a los bares que no le gustan. Y no es el único caso. Luego tienen cosas como Balcón de Rosales, que se ha tirado bien de tiempo, sobre terrenos municipales, y con los seguratas que conocemos. Me pregunto cuántas redadas sufren sitios como Joy Eslava o Pachá.
Los maderos, a fin de cuentas, no son más que unos mandados. Aunque siempre hay excepciones. Aquí el villano es ese "demócrata de centro y tolerante" que dirige la alcaldía, y la arpía de la Comunidad. Es lo que hay en este Madrid, cada vez más alejado de los 80.
6 comentarios:
Primero escribes el texto sin puntuacion, y luego empiezas a meter comas indiscriminadamente donde caigan, no? Rompen muchísimo el ritmo de lectura
Perdone usted, Don Garcilaso. El caso es que la gente que lo ha leído, no me ha hecho tales observaciones. Pero vamos, lo tomaré en cuenta, para no ofender a tan ilustre crítico literario.
Y a usted se le ha olvidado poner el signo de interrogación al principio, y lo ha puesto a la manera anglosajona. Fíjese qué cosas.
je,otro mas al saco,hace menos de un mes estuvieron en una semana dos dias(domingo y viernes) en el caratulas de mostoles y se fueron mosqueados por que no encontraron nada,en fin,tendremos que aguantar carros y carretas como siempre.presi
¡Dí que si Pistolas!,...por cierto, no solo hay que tener en cuenta las comas como signos de puntuación sino también las tildes, que no acentos.
Raquel.
pos a los 5 min llegue yo y ya decia q la peña taba mu parada...
Creo que puntuación lleva acento. Y el punto final, por favor.
¡Menudo soplapollas!
Sigue así Pistolas.
Un abrazo.
Bola8
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